
Componentes Sanguíneos: Donación y Uso
Información del documento
Autor | Dra. Leticia Álvarez Pequeño |
Escuela | H. Xeral-Cíes, Vigo |
Especialidad | Medicina |
Lugar | Vigo |
Tipo de documento | Apuntes de clase/Material didáctico |
Idioma | Spanish |
Formato | |
Tamaño | 2.19 MB |
Resumen
I.Concentrados de Hematíes Concentrados de Glóbulos Rojos
Los concentrados de hematíes son esenciales para aumentar rápidamente la capacidad de transporte de oxígeno a los tejidos, evitando lesiones irreversibles por hipoxia tisular. Su indicación principal es la corrección de la anemia en casos de hemorragia aguda, shock hipovolémico, o situaciones con hipoxia significativa. La decisión de transfundir se basa en la valoración del volumen intravascular, la estabilidad hemodinámica, y la presencia de síntomas de hipoxia. Se deben considerar factores de riesgo como enfermedad coronaria, insuficiencia cardíaca congestiva o insuficiencia vascular cerebral al determinar el umbral de hemoglobina (Hb) para la transfusión. La Hb y el hematocrito (Hto) no son indicadores fiables hasta que se repone la volemia. En la fase preoperatoria, la anemia es un factor de comorbilidad que aumenta la mortalidad. El tratamiento específico de la causa subyacente (deficiencia de hierro, vitamina B12 o ácido fólico) es prioritario.
1. Indicaciones y Objetivo de los Concentrados de Hematíes
Los concentrados de hematíes están indicados para lograr un rápido aumento en la capacidad de transporte de oxígeno a los tejidos, previniendo lesiones irreversibles por hipoxia tisular. Su uso principal se centra en situaciones de hemorragia aguda, ya sea por intervenciones quirúrgicas o traumatismos, con el objetivo de prevenir el shock hipovolémico. Es fundamental restaurar la volemia para mantener la presión arterial. Una vez restaurada la volemia, los mecanismos fisiológicos pueden mantener un aporte de oxígeno adecuado incluso con niveles de hemoglobina (Hb) tan bajos como 6 g/dl. La administración de cristaloides o coloides se realiza de forma complementaria para el control de la hemorragia. Es importante destacar que la determinación de Hb/Hto no resulta útil para la valoración transfusional hasta que la volemia se haya repuesto.
2. Criterios para la Decisión Transfusional
La decisión de transfundir con concentrados de hematíes se basa en una evaluación cuidadosa del paciente. Se considera la valoración del volumen intravascular, la presencia de inestabilidad hemodinámica e hipoxia, y los síntomas de hipoxia tisular incluso en normovolemia. Signos como hipotensión y taquicardia relativa, así como una saturación de oxígeno en sangre venosa mezclada baja, son indicadores importantes. Si bien la transfusión está justificada por debajo de 7 g/dl de Hb, valores más bajos pueden ser tolerados en una valoración individualizada, dependiendo de la presencia de síntomas o signos de anemia hipóxica y la ausencia de factores de riesgo. En pacientes hemodinámicamente estables sin factores de riesgo asociados, la transfusión no está indicada incluso con niveles de Hb entre 7 y 8 g/dl. Pacientes con factores de riesgo (coronarios, insuficiencia cardíaca congestiva, insuficiencia vascular cerebral) o con síntomas de anemia hipóxica pueden requerir transfusión con niveles de Hb ligeramente superiores. Para pacientes con infarto agudo de miocardio o angina inestable, los umbrales de Hb para transfusión también son más altos.
3. Anemia Preoperatoria e Intraoperatoria
En la fase preoperatoria, la presencia de anemia es un factor independiente de morbilidad y mortalidad. Se debe buscar la causa de la anemia (deficiencia de hierro, vitamina B12 o ácido fólico) e instaurar un tratamiento específico. Durante la fase intraoperatoria, los niveles de Hb para indicar transfusión varían según la presencia o ausencia de comorbilidades. En pacientes sin comorbilidades, se puede considerar la transfusión a partir de 6-7 g/dl de Hb (Hto 18-22%), mientras que en pacientes con comorbilidades, este umbral puede ser mayor, llegando incluso a 10 g/dl en pacientes hemodinámicamente estables. En situaciones como infarto agudo de miocardio, ventilación mecánica o politraumatizados graves, el umbral de transfusión puede ser más bajo (menor a 7 g/dl). En pacientes con sepsis o lesiones neurológicas y hemorragia subaracnoidea, la valoración es individualizada, sin un umbral óptimo definido.
4. Estrategias Transfusionales y Consideraciones Adicionales
En pacientes en UCI, una estrategia transfusional restrictiva (transfundir si Hb < 7 g/dl para mantener una Hb entre 7-9 g/dl) no es inferior a una estrategia liberal. Siempre se debe valorar el tratamiento específico de la causa subyacente de la anemia, y la transfusión solo debe indicarse si no se puede esperar a que este tratamiento haga efecto. Se debe mantener la cifra de Hb pretransfusional que asegure la ausencia de síntomas, siendo variable según las características del paciente. La compensación fisiológica puede mantener una oxigenación adecuada incluso con niveles de Hb significativamente bajos. El gasto cardíaco normalmente no aumenta hasta llegar a una Hb de 7 g/dl, pudiendo llegar a niveles incluso de 5 g/dl. La conservación de los concentrados de hematíes se realiza a una temperatura entre 2-6°C para su almacenamiento, y entre 1-10°C para su transporte.
5. Preparados de Concentrados de Hematíes
Existen diferentes preparados de concentrados de hematíes, incluyendo aquellos pobres en leucocitos en solución aditiva SAG-M, obtenidos por donación (450-50 ml con un hematocrito resultante del 55%). Estos preparados eliminan linfocitos T, siendo indicados en estados de inmunodeficiencia celular para evitar el efecto injerto contra huésped (observado en trasplantes de médula ósea, tratamientos con ciertas medicaciones, etc.), o en déficit de IgA o reacciones anafilácticas graves. Sin embargo, presentan un riesgo infeccioso. También existen concentrados de hematíes irradiados y lavados. Los concentrados de hematíes lavados eliminan las proteínas plasmáticas.
II.Transfusión de Plaquetas
La transfusión de plaquetas se indica para tratar o prevenir hemorragias atribuibles a un déficit cuantitativo o cualitativo de plaquetas. La decisión se toma considerando el recuento plaquetario y la gravedad de la hemorragia, categorizada según la OMS en grados 0 a 3. La profilaxis con transfusión de plaquetas se recomienda en procedimientos invasivos, especialmente en cirugías del sistema nervioso central o del globo ocular, o en pacientes con trombopenia y factores de riesgo hemorrágico. Valores umbral de recuento plaquetario para transfusión varían según la presencia de factores de riesgo y la severidad de la hemorragia. El KIT de INTERCEPT permite inactivar patógenos en las plaquetas.
1. Indicaciones de la Transfusión de Plaquetas
La transfusión de plaquetas tiene como objetivo principal evitar o tratar hemorragias atribuibles a un déficit cuantitativo o cualitativo de plaquetas. El documento describe la clasificación de la hemorragia según la OMS en tres grados: grado 0 (sin hemorragia), grado 1 (petequias, equímosis, sangrado leve) y grado 2 y 3 (hemorragias que pueden requerir transfusión, incluyendo epistaxis, melena, hematuria, hematemesis y hemoptisis). La decisión de transfundir dependerá de la gravedad de la hemorragia y del recuento plaquetario. Un KIT de INTERCEPT se menciona para la inactivación de patógenos, mediante la mezcla con amotosaleno y exposición a luz UV de larga longitud de onda, seguido de agitación con un dispositivo de adsorción. La conservación de las plaquetas se realiza a 22ºC ±2ºC en agitación continua, con una caducidad de 7 días.
2. Profilaxis en la Transfusión de Plaquetas
La profilaxis con transfusión de plaquetas se considera en función del recuento plaquetario y la presencia de factores de riesgo hemorrágico. Se establecen umbrales de recuento plaquetario para la profilaxis: menos de 5 x 10⁹/L en trombopenia central de larga evolución sin tratamiento activo ni antecedentes; menos de 50 x 10⁹/L para procedimientos invasivos o cirugía; y menos de 100 x 10⁹/L para cirugía del sistema nervioso central o del globo ocular. La presencia de fiebre superior a 38.5ºC también se considera un factor de riesgo. En trombopenia central sin factores de riesgo, el umbral puede ser menor (menos de 10 x 10⁹/L), mientras que con factores de riesgo, este umbral se eleva a menos de 20 x 10⁹/L. Se recomienda mantener un recuento plaquetario superior a 50 x 10⁹/L. Situaciones especiales, como hemorragia masiva y politraumatismos, requieren una consideración individualizada. En casos de hemorragia del sistema nervioso central, el umbral de transfusión puede ser superior a 100 x 10⁹/L.
3. Transfusión Terapéutica de Plaquetas
La transfusión terapéutica de plaquetas está indicada en casos de hemorragia de grado 2 o superior atribuible a un déficit de plaquetas. El documento menciona que el sobrenadante de una donación estándar de plaquetas contiene aproximadamente 250 cc, mientras que la donación por aféresis puede proporcionar hasta 600 cc. No se detalla la cantidad exacta de plaquetas en cada tipo de donación, pero se indica que el volumen de la donación estándar es menor que la obtenida mediante aféresis. No se mencionan otros detalles sobre procedimientos o consideraciones específicas para la transfusión terapéutica más allá de la correlación con la clasificación de la hemorragia según su grado y la necesidad de corregir el déficit de plaquetas.
III.Plasma Fresco Congelado PFC
El plasma fresco congelado contiene todos los factores de la coagulación y se utiliza en el tratamiento de déficits de múltiples factores o de un factor específico no disponible en concentrados (como el factor V). Está indicado en hemorragias, cirugía urgente, y para la reversión urgente de anticoagulantes orales. Según las guías SETS 2010, no es la primera opción a menos que existan contraindicaciones para los concentrados de complejo de protrombina (CCP). Se utiliza en transfusiones masivas y en casos de deficiencias de proteínas plasmáticas, como en el angioedema hereditario. La irradiación gamma se utiliza como medida profiláctica en determinadas situaciones.
1. Composición e Indicaciones del Plasma Fresco Congelado PFC
El plasma fresco congelado (PFC) contiene todos los factores de la coagulación, incluidos los factores V y VIII. Su principal indicación es el tratamiento de déficits de múltiples factores de coagulación o de un único factor para el cual no existen concentrados disponibles, como el factor V. Se utiliza tanto en situaciones de hemorragia como de profilaxis. También se indica para la reversión urgente de los efectos de anticoagulantes orales en casos de hemorragia o cirugía urgente. Las guías SETS 2010 lo señalan como una opción no de primera elección, reservándolo para situaciones donde no se dispone de concentrados de complejo de protrombina (CCP) o existen contraindicaciones para su uso. Se menciona su uso en transfusiones masivas y en deficiencias de proteínas plasmáticas, como en el caso del inhibidor C1-esterasa asociado al angioedema hereditario. El volumen de una donación estándar es de 250 cc, mientras que mediante aféresis se puede obtener 600 cc.
2. Criterios para la Transfusión de PFC
La transfusión de PFC se considera aceptable cuando los niveles de INR y TTPA (tiempo de tromboplastina parcial activada) superan 1.5 veces el límite superior de la normalidad. Sin embargo, no está indicada si la actividad basal de los factores de coagulación es mayor o igual al 40%. Se sugiere la profilaxis con PFC antes de procedimientos invasivos como cateterismo venoso central (CVC), toracocentesis, endoscopia, broncoscopia, biopsias, punción lumbar (PL) o procedimientos epidurales. La irradiación gamma del PFC, con una dosis media de 25-50 Gy, no modifica la eficacia de sus componentes sanguíneos.
IV.Concentrados de Granulocitos y Profilaxis de la Enfermedad de Injerto contra Huésped EICH
Los concentrados de granulocitos se utilizan principalmente en la profilaxis de la enfermedad de injerto contra huésped (EICH), especialmente en trasplantes alogénicos y autólogos de progenitores hematopoyéticos (Alo-TPH y ATSP). Las indicaciones incluyen transfusiones de familiares o donantes HLA compatibles, así como en síndromes de inmunodeficiencia celular congénita. La irradiación de los concentrados y el tiempo de profilaxis varían según el tipo de trasplante y el estado inmunológico del receptor y donante, considerando tratamientos con análogos de purinas como la fludarabina, cladribina y pentostatina.
1. Indicaciones de los Concentrados de Granulocitos y Profilaxis de la EICH
Los concentrados de granulocitos se utilizan principalmente en la profilaxis de la enfermedad de injerto contra huésped (EICH), una complicación grave que puede surgir después de un trasplante de progenitores hematopoyéticos. El documento indica su uso tanto en trasplantes alogénicos (Alo-TPH) como autólogos (ATSP). Las indicaciones se extienden a situaciones de inmunodeficiencia celular congénita, transfusiones de familiares de primer o segundo grado, y transfusiones con compatibilidad HLA, tanto familiares como no familiares. Se menciona también la posibilidad de transfusión intrauterina y exanguinotransfusión, aunque sin mayor detalle en el contexto de los granulocitos.
2. Periodos de Profilaxis y Consideraciones del Donante y Receptor
El periodo de profilaxis con concentrados de granulocitos varía según el tipo de trasplante y el estado inmunológico del receptor y donante. En el caso de trasplantes alogénicos, la profilaxis se extiende desde 14 días previos a la recolección de progenitores hasta el final de la misma. Para trasplantes autólogos, la profilaxis abarca desde 14 días previos al trasplante hasta al menos 3 meses después, o hasta que haya evidencia de implante del injerto y reconstitución. Si la EICH es crónica y activa, la profilaxis puede ser indefinida. En el donante, la transfusión puede ser necesaria desde 14 días previos a la recolección de progenitores. Para el receptor, la profilaxis se extiende desde 14 días antes del trasplante alogénico hasta el fin de la profilaxis de la EICH o hasta que el recuento de linfocitos supere 1 x 10⁹/l. Se mencionan tratamientos con análogos de purinas (fludarabina, cladribina, pentostatina) como factores que pueden prolongar la necesidad de profilaxis, incluso hasta un año o indefinidamente en casos de linfoma de Hodgkin.